La Pimef rechaza el recorte del Govern en la FP de Formentera
La patronal advierte de que la formación de los jóvenes es decisiva para el futuro de la isla
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Joan Costa es el presidente de los pequeños y medianos empresarios de Formentera. C.C.
C. C. | FORMENTERA El presidente de la Pime de Formentera, Joan Costa, expresó ayer su rechazo a las intenciones de la conselleria de Educación del Govern balear de recortar los ciclos formativos presenciales de Formentera. El representante de la patronal recordó que la implantación de estos cursos se logró hace más de 15 años gracias a la reivindicación de los padres y de la asociación que preside. Señaló que la reducción o eliminación de esta oferta formativa dirigida a jóvenes supone un «retroceso» para el modelo educativo local.
«La postura de la Pime es que existen áreas en las que no se puede recortar y la educación es una de ellas», sentenció. Para argumentar su postura recordó que la Pime apuesta por la calidad del producto turístico que ofrece la isla y en ese contexto opinó: «Estamos en un presente y ante un futuro en el que Formentera debe destacar por un producto de calidad, a partir de esto no podemos plantear eliminar o reducir la formación de nuestros jóvenes, por aquí vamos muy mal, por nuestra parte es un no rotundo, no se puede y no debemos hacer esto, si no, hipotecaremos nuestro futuro».
El presidente de los pequeños y medianos empresarios advirtió: «Nunca renunciaremos a los ciclos formativos presenciales que actualmente tenemos». Incluso señaló que considera que se deben ampliar a otras enseñanzas como la planteada por el Consell de Formentera relativa a actividades deportivas. «El módulo de cocina no se puede sustituir ni eliminar, los futuros cocineros de nuestros negocios tienen que saber hacer un bullit pagès enseñado en la isla», agregó.
El presidente de la Pime incluso se puso como ejemplo y recordó que su generación tuvo que viajar fuera de la isla para formarse y que no desea que esa experiencia la tengan que vivir otros jóvenes: «En mi época tuve que ir a Ibiza y aquello me supuso una traba muy grande y un esfuerzo para mi familia cuando ya veía que era importante que ayudara a mi padre en el negocio y ahora veo que se pretende volver a esta situación».
Siguiendo con esta reflexión añadió: «Formentera no es comparable a otras islas de Balears, en las que los jóvenes tienen opciones de elección y pueden trasladarse a los centros educativos cercanos a su municipio donde impartan la formación profesional que les interese. En cambio en Formentera esta opción, sencillamente, no existe». No obstante, se mostró sensible a la racionalización de los recursos para reducir costes pero no a costa de encoger la oferta educativa de los ciclos formativos.
«Todos asumimos la crisis pero los recortes en Educación no son admisibles y si se producen, que sean en todas las áreas. De todas formas hay sitios donde no se puede recortar porque hipotecaremos nuestro futuro: si queremos apostar por la calidad en ningún caso se puede reducir la formación», concluyó.
«La postura de la Pime es que existen áreas en las que no se puede recortar y la educación es una de ellas», sentenció. Para argumentar su postura recordó que la Pime apuesta por la calidad del producto turístico que ofrece la isla y en ese contexto opinó: «Estamos en un presente y ante un futuro en el que Formentera debe destacar por un producto de calidad, a partir de esto no podemos plantear eliminar o reducir la formación de nuestros jóvenes, por aquí vamos muy mal, por nuestra parte es un no rotundo, no se puede y no debemos hacer esto, si no, hipotecaremos nuestro futuro».
El presidente de los pequeños y medianos empresarios advirtió: «Nunca renunciaremos a los ciclos formativos presenciales que actualmente tenemos». Incluso señaló que considera que se deben ampliar a otras enseñanzas como la planteada por el Consell de Formentera relativa a actividades deportivas. «El módulo de cocina no se puede sustituir ni eliminar, los futuros cocineros de nuestros negocios tienen que saber hacer un bullit pagès enseñado en la isla», agregó.
El presidente de la Pime incluso se puso como ejemplo y recordó que su generación tuvo que viajar fuera de la isla para formarse y que no desea que esa experiencia la tengan que vivir otros jóvenes: «En mi época tuve que ir a Ibiza y aquello me supuso una traba muy grande y un esfuerzo para mi familia cuando ya veía que era importante que ayudara a mi padre en el negocio y ahora veo que se pretende volver a esta situación».
Siguiendo con esta reflexión añadió: «Formentera no es comparable a otras islas de Balears, en las que los jóvenes tienen opciones de elección y pueden trasladarse a los centros educativos cercanos a su municipio donde impartan la formación profesional que les interese. En cambio en Formentera esta opción, sencillamente, no existe». No obstante, se mostró sensible a la racionalización de los recursos para reducir costes pero no a costa de encoger la oferta educativa de los ciclos formativos.
«Todos asumimos la crisis pero los recortes en Educación no son admisibles y si se producen, que sean en todas las áreas. De todas formas hay sitios donde no se puede recortar porque hipotecaremos nuestro futuro: si queremos apostar por la calidad en ningún caso se puede reducir la formación», concluyó.
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